
Las personas se someten a procedimientos quirúrgicos bucales cuando otras modalidades de tratamiento no tratan los problemas dentales. La cirugía oral puede asustar a un hombre debido a la palabra cirugía que implica. Si eres alguien que busca un procedimiento quirúrgico bucal, no te preocupes. Hemos cubierto una breve descripción general del tema en la información que se proporciona a continuación.
Tabla de contenidos
¿Qué es la cirugía bucal?
La cirugía oral y maxilofacial implica procedimientos que se utilizan para tratar los problemas asociados con los dientes, la cara y la mandíbula. Muchas técnicas tienen como objetivo tratar problemas dentales como la extracción de dientes, y algunos métodos seleccionados tienen como objetivo la reconstrucción facial y el tratamiento de casos de traumatismos que afectan a la región maxilofacial.
Los cirujanos maxilofaciales son especialistas capacitados en cirugía oral y maxilofacial que pueden realizar cirugías complejas. Cualquier dentista puede realizar eficientemente procedimientos básicos, por otro lado.
Dependiendo de la condición del problema dental en cuestión, los procedimientos quirúrgicos se pueden clasificar en cuatro categorías amplias:
- Procedimientos electivos
- Procedimientos de emergencia
- Paciente interno
- Paciente externo
Contraindicaciones de la cirugía bucal.
Existen algunas contraindicaciones relativas y algunas absolutas para los procedimientos quirúrgicos orales. Algunas de las condiciones de principal preocupación para cualquier procedimiento quirúrgico oral son:
- Casos de infección activa donde la eficacia de la anestesia es dudosa.
- Hipertensión, donde la presión arterial sistólica es superior a 160 mmHg y la presión arterial diastólica es superior a 100 mm Hg.
- osteonecrosis
- Un sitio quirúrgico cercano al área del cáncer puede provocar metástasis si se realiza el procedimiento.
¿Por qué cirugía bucal?
La cirugía oral y maxilofacial se realiza para tratar diversos problemas de dientes, mandíbula y esqueleto facial. El objetivo principal de cualquier procedimiento quirúrgico oral se clasifica en términos generales en cuatro categorías principales:
Finalidad diagnóstica/terapéutica
- Cirugía de ATM: se utiliza para tratar trastornos de la articulación temporomandibular. Trata principalmente el dolor en la ATM al masticar.
- Osteotomía de los huesos de la mandíbula: realizada para reposicionar quirúrgicamente los huesos de la mandíbula para tratar la apnea obstructiva del sueño.
- Extirpación de tumores: escisión quirúrgica de crecimiento excesivo anormal, incluidas masas malignas y benignas.
Dental
- Extracción de dientes: este es siempre el último recurso cuando todos los demás tratamientos dentales no han logrado salvar el diente.
- Extracción de muelas del juicio: cuando el dolor debido a la erupción de un tercer molar se vuelve recurrente y no se controla con ninguna medida.
- Colocación de implantes dentales: colocación de un poste de titanio en la mandíbula que imita exactamente el diente natural y ayuda a restaurar la forma y función estándar.
- Las cirugías ortognáticas están indicadas cuando la corrección de la mordida es imposible debido únicamente al movimiento de los dientes al persistir la discrepancia esquelética.
Estético
- Rinoplastia
- Blefaroplastia
- Genioplastia
- Procedimientos de aumento de pómulos.
- Cirugías de estiramiento facial
Procedimientos reconstructivos
- Injerto de piel
- Cirugías de colgajo
- Procedimientos de reconstrucción de labios.
- Cirugías para reconstruir los daños por fracturas de Fort
¿Cómo prepararse para la cirugía?
Para prepararse bien para la cirugía, se reunirá con su cirujano mucho antes del día de la cirugía y él lo guiará paso a paso sobre cómo prepararse mental y físicamente para el día. No dude en hacer tantas preguntas como sea posible sobre la cirugía.
Su cirujano podría recomendarle algunos análisis de sangre para estar al tanto de las posibles complicaciones, si las hubiera, durante la cirugía. Se realizará un análisis radiográfico del sitio quirúrgico y de los huesos adyacentes para formular un plan de tratamiento adecuado.
Puede haber cambios específicos en el estilo de vida, como dejar de fumar y dejar el alcohol, que su dentista puede aconsejar.
En el caso de procedimientos quirúrgicos que requieran anestesia general, pueden existir algunas restricciones en la ingesta de alimentos y líquidos para una conducción fluida de la anestesia.
Si está tomando ciertos medicamentos como antihipertensivos o anticoagulantes, es mejor informar a su cirujano.
Pautas de recuperación después de la cirugía.
Para cualquier procedimiento quirúrgico bucal, existe un tiempo de recuperación. Para mejorar la capacidad de curación y evitar complicaciones como la infección del sitio quirúrgico, lo mejor es seguir las instrucciones posquirúrgicas dadas por su dentista.
Controlar el dolor después del procedimiento.
Hay dos terapias principales que se utilizan para controlar el dolor y la hinchazón posquirúrgicos: bolsas de hielo y medicamentos. La bolsa de hielo debe aplicarse de forma intermitente en el sitio de la cirugía, como 10 minutos dentro y 10 minutos fuera de la cara.
Los medicamentos más comunes recetados para controlar el dolor son los AINE. Se sigue un régimen para el manejo eficaz del dolor las 24 horas del día para administrar analgésicos.
Qué evitar y qué consumir
Durante los primeros días después de la cirugía se recomienda no comer nada duro y también evitar masticar del lado donde se realizó la cirugía. Lo mejor es consumir una dieta blanda y semisólida. Evite comer alimentos calientes y picantes.
Si es fumador y consume alcohol, lo mejor es abstenerse de practicarlo. Al volver a una dieta normal dentro de unos días según lo recomendado por el cirujano, intente consumir alimentos ricos en vitaminas, especialmente vitamina C, que favorecen la curación.
Cuándo contactar a su cirujano
Una ligera molestia e hinchazón después de la cirugía son normales y pueden controlarse eficazmente siguiendo la rutina de cuidados posteriores. Debe comunicarse con su cirujano si enfrenta uno o más de los siguientes problemas enumerados.
- Sangrado incontrolado que no se controla con compresas de presión.
- Dolor que no se puede controlar con medicamentos.
- Signos de infección como fiebre y formación de pus.
- Hinchazón persistente o que aumenta de tamaño
- Entumecimiento constante de labios o cualquier otra zona.
Riesgos involucrados con los procedimientos quirúrgicos orales.
Como cualquier otro procedimiento quirúrgico, también existen algunos riesgos relacionados con las cirugías orales y maxilofaciales. Algunos de los riesgos comunes asociados son:
- Posible cambio en la apariencia facial con cirugías mayores.
- La lesión de los nervios provoca daño nervioso temporal y daño total en algunos casos.
- Alveolitis seca u osteítis alveolar por desintegración del coágulo sanguíneo por incumplimiento de las instrucciones de seguridad dadas al paciente
- El cambio en la alineación de la mandíbula y la mordida en casos muy raros también es una complicación asociada con ciertas cirugías mayores.